El round cinco del campeonato mundial de la Formula 1 hace parada en Miami para el estreno de un nuevo circuito en la máxima categoría del automovilismo.
El autódromo internacional de Miami se convirtió oficialmente en la decimoprimera sede en los Estados Unidos que alberga un Gran Premio de la máxima categoría del automovilismo deportivo con una carrera que durante sus dos primeros tercios fue bastante plana y sin mayores incidentes que el abandono del piloto chino Zhou del equipo Alfa Romeo y el temprano adelantamiento de Max Verstappen sobre Carlos Sainz y Charles Leclerc para asegurar el primer lugar sobre los Ferrari.
No fue sino hasta la vuelta 41 de 57 en la que las emociones llegaron al circuito en el estado de Florida, cuando tras un reingreso de Pierre Gasly a pista, Lando Norris impactó su Mclaren contra el Alpha Tauri del francés, ocasionando un safety car que reagrupó a los líderes y nos brindó un relanzamiento de carrera vertiginoso en el que los fanáticos pudimos disfrutar de dos batallas brutales entre los equipos líderes del campeonato: Red Bull y Ferrari.
Checo Pérez quien presentó dificultades con su unidad de potencia había perdido bastante tiempo frente al madrileño Carlos Sainz a quien logró darle alcance tras el relanzamiento de carrera manteniéndose en distancia de DRS durante las vueltas subsecuentes y finalmente lanzando un ataque fallido de adelantamiento, pues a la salida de la curva tuvo que bloquear los neumáticos al frenar tarde para ganarle la posición a Sainz, misma que perdió tras la frenada abrupta.
Redención para Sainz
Miami significó un resurgimiento para el joven Carlos Sainz, quien en los dos Grandes Premios pasados tuvo jornadas difíciles tras sufrir abandonos en Imola y Australia. Miami comenzaba con dificultades para el madrileño pues durante la ronda de prácticas libres sufrió un grave percance que minó su confianza y pronosticaba un fin de semana difícil. Sin embargo, durante la clasificación consiguió colocarse en la primera fila de la parrilla al terminar segundo en la Q3 y finalmente consiguió su reivindicación frente a los de Maranello al cerrar el podio en la tercera plaza detrás de su compañero Charles Leclerc.