Hiperautos

La bendición del Pagani Huayra Roadster

En el mundo de los autos existen obras con diversas génesis, para algunos se trata de ser más rápidos que cualquiera, otros se enfocan en la tecnología y el balance de prestaciones de alto rendimiento, pero para Horacio Pagani la inspiración y pasión debe ser el principal motor de sus obras.

Publicado

en

En el mundo de los autos existen obras con diversas génesis, para algunos se trata de ser más rápidos que cualquiera, otros se enfocan en la tecnología y el balance de prestaciones de alto rendimiento, pero para Horacio Pagani la inspiración y pasión debe ser el principal motor de sus obras.

Testigo de esta idea es el nuevo Huayra Roadster que mantiene vigente la visión bajo la cuál se crean todos los autos de la casa Pagani que desde el Zonda C12 han ofrecido una experiencia de manejo sin igual.

Si bien este hiperauto toma como base el Huayra BC, por decirlo de alguna manera, Pagani ha innovado una vez más en los componentes recurriendo a un nuevo compuesto conocido como carbon-titanio, una combinación de fibra de carbono amalgamada con titanio que ofrece una rigidez y tolerancia al daño superior, vista únicamente en la industria aeroespacial.

Es sobre esta estructura que Mercedes Benz en su división de alto desempeño AMG ha creado un motor V12 de 5.9 litros y 764 HP, conforme a las especificaciones de Pagani para impulsar los 1,2080 Kg de peso del Huayra Roadster.

Naturalmente no basta con una gran potencia para mantener a este auto adherido al asfalto por lo que su diseño incorpora un sistema aerodinámico activo con flaps que cambian el flujo de aire para obtener un máximo agarre.

Pero lo que destaca de este hiperauto es el mensaje: la consistencia es la mejor forma de enfrentar los embates del tiempo.

Así como lo ha expresado el mismo Horacio Pagani “el volante se comunica con la pista” y lograr eso requiere de pasión en cada aspecto de la construcción del auto, principalmente en una industria donde la tecnología ha simplificado el manejo a un conjunto de sensores que le dicen al conductor lo que debe sentir.

Para Pagani cada auto es una obra de arte, sin banalizar el término, pero cuando lo que se busca expresar es el sentir de cada una de las personas que construyen a mano cada auto y una visión es fácil entender porque concibe sus hiperautos de esta forma.

Por ello este italo-argentino siempre concibe la adquisión de un Pagani como un acto irracional, pero por si acaso quedara duda también se suma a eso las 100 unidades únicas vendidas a un precio base de $2.4 millones de Euros.

Novedades

Salir de la versión móvil